EL TERCER OJO
(Del libro “El Alma y su Mecanismo, A.B.)
1. Ningún hombre puede ser un mago o trabajador en magia blanca
hasta que no se le haya abierto el tercer ojo o esté en proceso de abrirse,
pues por medio de ese ojo se energetiza, dirige y controla la forma mental y
los constructores o fuerzas menores son impulsados a realizar cualquier tipo de
actividad En el ser humano, el “Ojo de
Shiva” está situado en el centro de la frente entre los dos ojos físicos.
2. Es el ojo de la visión interna y quien lo haya abierto puede
dirigir y controlar la energía de la materia, ver todas las cosas en el Eterno
Ahora, estar más en contacto con las causas que con los efectos, leer los
archivos akáshicos y ver clarividentemente. Por lo tanto, el que lo posee puede
controlar a los constructores de grado inferior.
3. Practicando la visualización se desarrolla el tercer ojo. Las
formas visualizadas y las ideas y abstracciones que durante el proceso se
revisten de forma y se les da forma mentalmente, se ven a pocas pulgadas del
tercer ojo. Cuando el yogui oriental dice de concentrarse en la punta de la
nariz se refiere a este proceso. Esta frase engañosa vela una gran verdad.
4. El centro entre las cejas, comúnmente llamado el tercer ojo,
tiene una función poco común y peculiar.
...Los estudiantes no deben confundir la glándula pineal con el
tercer ojo, y aunque están relacionados, no son lo mismo.
...El tercer ojo se manifiesta como resultado de la interacción
vibratoria entre las fuerzas del alma que trabajan por medio de la glándula
pineal, y las fuerzas de la personalidad que actúan por medio del cuerpo
pituitario. Estas fuerzas negativas y positivas interaccionan, y cuando son
suficientemente potentes producen la luz en la cabeza. Así como el ojo físico
vino a la existencia en respuesta a la luz del sol, también el ojo espiritual
vino, análogamente, en respuesta a la luz del sol espiritual. A media que el
aspirante se desarrolla se hace consciente de la luz. No sólo me refiero a la
luz dentro del aspirante mismo, sino a la luz en todas las formas, velada por
todas las envolturas y expresiones de la vida divina. A medida que se
acrecienta su percepción de esta luz, así se desarrolla el mecanismo de la
visión y viene a la existencia, en el cuerpo etérico, el mecanismo mediante el
cual él ve las cosas a la luz espiritual.
Éste es el Ojo de Shiva, porque sólo se utiliza plenamente en el
trabajo mágico cuando el aspecto monádico, el de la voluntad, controla.
Por medio del tercer ojo, el alma lleva a cabo tres actividades,
y son:
1. El ojo de la visión. A través de él el hombre espiritual ve
más allá de las formas de todos los aspectos de la expresión divina. Se hace
consciente de la luz del mundo y toma contacto con el alma dentro de todas las
formas. Así como el ojo físico registra las formas, también el ojo espiritual
registra la iluminación dentro de esas formas, “iluminación” que indica un
estado específico del ser. Abre el mundo de la radiación.
2. El factor controlador en el trabajo mágico. Todo el trabajo
de magia blanca se lleva a cabo con un propósito definidamente constructivo,
que se hace posible mediante la voluntad inteligente. En otras palabras, el
alma conoce el Plan, y cuando el alineamiento y la actitud son correctos, el
aspecto voluntad del hombre divino puede actuar y producir resultados en los
tres mundos. El órgano empleado es el tercer ojo. Su analogía puede comprobarse
en el poder observado frecuentemente en el ojo humano, cuando domina a otros
seres humanos y animales con una mirada, y con la mirada fija puede actuar
magnéticamente. La fuerza fluye a través del enfocado ojo humano y también a
través del tercer ojo enfocado.
3. Su aspecto destructor y la energía que fluye a través del
tercer ojo puede tener un efecto desintegrador y destructivo. Mediante su enfocada
atención dirigida por la voluntad inteligente, puede expulsar la materia
física. Es el agente del alma en el trabajo purificador En forma misteriosa, el alma es el ojo de la
mónada, que le permite a la mónada, el Ser puro, actuar, hacer contacto,
conocer y ver.
LA IMPRESIÓN
Para el aspirante y particularmente el discípulo consciente, la
impresión a considerar procede de cuatro fuentes:
1. Del alma del discípulo.
2. Del Ashrama al cual pertenece.
3. Del Maestro directamente.
4. De la Tríada espiritual, vía el Antakarana.
Las dos primeras etapas abarcan el período de las dos primeras
iniciaciones; la tercera etapa precede a la tercera iniciación y persiste hasta
que el discípulo se convierte en Maestro; el cuarto tipo de impresión
informativa puede ser registrado después de la tercera iniciación y llegar al
discípulo en el Ashrama; entonces tiene la tarea de impresionar su mente con lo
que se le ha dicho y ha conocido en el Ashrama; finalmente, como Maestro de un
Ashrama, emprende una de las principales tareas jerárquicas, la de dominar la
Ciencia de Impresión. Por lo tanto esta etapa de impresión comprende dos
aspectos: uno se refiere a la capacidad de recibir impresiones; el otro a la
capacidad de ser agente impresor. No se le permite al discípulo practicar el
arte de la impresión hasta que se encuentre entre quienes reciben impresión de
la Tríada y, por lo tanto, de Shamballa, dentro de la zona protectora o aura
del Ashrama al que pertenece. Debe recordarse que esta Ciencia de Impre¬sión
es, en realidad, la ciencia de la construcción, vitalización y dirección de las
formas mentales; sólo a un discípulo que haya pasado por los procesos de la
Transfiguración y no sea ya víctima de su propia personalidad, se le puede
confiar un ciclo tan peligroso de poderes. Mientras exista el deseo de obtener
el poder egoísta y controlar e influir materialmente las mentes de otros seres
humanos o grupos, no se le puede confiar al discípulo, de acuerdo a las reglas
jerárquicas, la creación deliberada de formas mentales, designadas para
producir efectos específicos y su divulgación entre individuos y grupos. Sólo
pueden hacerlo después de pasar las pruebas de la iniciación ‘de la
transfiguración.
La Ciencia de Impresión constituye la base para la práctica de
la telepatía.
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