SIMBOLISMO
DE LAS PALABRAS Y DE LAS IMÁGENES (A.C.V.)
Ponencia presentada en el último encuentro de Convivencia y Buena Voluntad celebrado en Córdoba.
Empecemos por decir que
todo es un símbolo, formas de pensamientos, palabras y obras con un significado
mucho más profundo que el que a simple vista podemos ver. Casi no nos damos
cuenta de esta realidad pero es la propia vida la que nos va mostrando el
significado de cada cosa y de cada concepto.
Es de suma
importancia el significado de las
palabras y si en la vida ordinaria es de valor que descubramos el significado
de cada palabra, en términos de espiritualidad lo es mucho más, porque en
espiritualidad buscamos y nos apoyamos en la raíz más profunda de todas las
cosas y en último extremo en el origen de todo, de donde todo procede.
Si somos estudiantes
espirituales hablemos de espiritualidad, del mundo de las energías, de la causa
y origen de toda la creación y de todos los acontecimientos. ¿Sabemos realmente
lo que es espiritualidad o lo confundimos con otras cosas, religiones por
ejemplo; o creemos que tenemos que estar de acuerdo necesariamente con
compañeros de camino que tienen altísimos conocimientos?. En espiritualidad
tenemos que ser nosotros mismos, sin ser dependientes de nadie, de ninguna
personalidad. Una cosa es compartir, intercambiar y otra muy distinta necesitar
recibir la aprobación de nadie, es nuestra conciencia la que debe regir, y lo
verdaderamente importante es la Verdad y nuestra conciencia que tenemos que
desarrollarla día a día mediante el estudio, la reflexión, la discriminación, y
el servicio.
Vamos a intentar introducirnos
en el significado simbólico de todo lo que somos y de todo lo que nos rodea, y
para ello, y siempre buscando LA VERDAD, preguntémonos ¿qué es un
símbolo?. Un símbolo es lo aparente o la forma de todo
cuanto existe, cuyo significado más profundo no se capta con los ojos físicos.
Símbolo es todo aquello que vemos, oímos, expresamos y que hasta que no
adquirimos un conocimiento más o menos amplio y profundo, no llegamos a
comprender su significado.
Hay símbolos en todos
los planos: físico, emocional y mental. Las propias palabras y mejor aún las
frases completas son símbolos. Un espiritualista con un alto nivel de
conciencia se expresará con gran precisión porque sabe de la importancia de las
palabras y su significado y por ello el estudiante espiritual precisa de un buen equipo de
expresión porque a través de él se tiene que manifestar la luz del alma con
todo su amor y sabiduría. En la medida que avanzamos en el camino elevamos
nuestro nivel de conciencia, lo cual nos va acercando a la sabiduría que no se
puede expresar sin ese buen equipo.
A partir de esta pequeña
introducción, esbozaremos algo de la simbología propiamente dicha y sería bueno
decir que los seres de la creación
son la manifestación simbólica de una energía invisible que ellos mismos
contienen en su interior. Si observamos atentamente podemos ver que la
creación entera es un código simbólico y
armónico, con una realidad oculta y misteriosa, a la cual solamente podemos acceder si traspasamos la
apariencia formal y penetramos en su profundo contenido y significado.
La Simbólica es la
ciencia que enseña al hombre a investigar en los misterios del cosmos y la
naturaleza, y para ello tenemos que empezar por conocernos a nosotros mismos,
el símbolo que representamos y que somos.
Como hemos dicho el ser
humano es un símbolo y de lo cual tardamos mucho en darnos cuenta y me atrevo a decir que nos
damos cuenta en el propio sendero espiritual, no antes, y en este sendero a mi
me costó mucho trabajo entender y aceptar que somos dioses imperfectos porque
nuestro auténtico ser no es el que vemos sino el que está oculto detrás de
nuestra apariencia, detrás de las forma. Somos esencia divina, lo cual nos exige
el desarrollo de esa esencia divina, a
través de todas nuestras vidas y de toda la evolución hasta llegar a entender este
gran misterio y su significado.
El símbolo solamente nos
debe servir para descubrir su significado, pero nunca para idolatrar ninguna
forma, porque precisamente no son las
formas lo que importan, sino su esencia, su razón de ser que es lo que
constituye la vida.
La Palabra tiene un triple significado: exotérico:
lo externo, lo concreto, las formas que vemos y tocamos; esotérico: lo interno, lo subjetivo que no podemos
ver con los ojos físicos; y lo trascendente,
porque trasciende lo puramente humano en su significado más profundo y
abstracto y que constituye toda la expresión simbólica de la Verdad. Por consiguiente, en cualquier campo de la
vida, tenemos que progresar desde un
primer conocimiento de lo concreto hasta el reconocimiento de lo más hondo y
subjetivo. Así es como llegamos al reconocimiento de la Divinidad en todos sus
campos y aspectos.
La Verdad es la
simbología de un concepto amplísimo y profundísimo que se encuentra una vez
examinados los pros y los contras sobre un determinado tema, y que nos
conduce a la solución del problema que nos ocupa, con la síntesis de los
argumentos favorables y los contrarios, y que trascendida la etapa de la mente
concreta percibiremos con absoluta claridad mediante la Intuición y la
Sabiduría, a la que todos llegaremos cuando corresponda.
La dualidad es un
símbolo que podemos apreciar en cualquier aspecto de la vida y está
representada por los polos positivo y negativo y que nos hacen respectivamente
activos y pasivos, y así tenemos: El Bien y el Mal, la Belleza y la Fealdad, la
Vida y la Muerte, la Verdad y la Mentira, el Vicio y la Virtud, la Fortuna y la
Desgracia, y tantos pares de opuestos. Estamos hablando de simbolismos.
El triángulo, la figura
geométrica resultante de la unión de tres puntos por medio de tres líneas
rectas iguales, es considerado como un símbolo de Perfección, Armonía y
Sabiduría, El TRIÁNGULO, representa la divinidad. Encontramos trinidades y trilogías
en todas las religiones, porque las religiones en sí mismas nacen de la
espiritualidad, de la fuente que todo lo genera, pero cuando interviene la mano
del hombre, modifica esa verdad de procedencia e impone sus dogmas.
Desde el triángulo,
irradian en sus tres lados otros tantos grupos de rayos que simbolizan la
fuerza expansiva del Ser, que desde un punto central infinitesimal se extiende
y llena el espacio infinito.
De esta manera llegamos
al “CÍRCULO”, estamos tratando del UNO, del Gran Hacedor que todo lo contiene.
El círculo es la idea
sintética de la perfección.
El Número uno o mónada
representa el principio activo, la
verdadera esencia de todas las cosas. Es
el símbolo del Dios único.
El CUADRADO, está relacionado con las formas físicas de
los elementos. El cuadrado representa la personalidad (cuerpos físico, etérico,
astral o de emociones y mental)
Algunos enunciados
simbólicos:
La escalera de Jacob, es
el emblema de las virtudes y de las cualidades espirituales del alma. Los
estados de la conciencia en el ser humano, se elevan hacia el cielo como aspiraciones
y se manifiestan en nosotros como inspiraciones. Estos son los "ángeles y
arcángeles de Dios", que bajan por la escalera. Simboliza también el
puente que se extiende desde todos los mundos hasta la divinidad.
El
simbolismo del Santo Grial va más allá de las apreciaciones de los diferentes
dogmas y creencias y refiriéndonos al ser humano el cáliz al completo está representado por la personalidad que hay
que purificarla y habilitarla, para ser el receptáculo del Verbo. “El Santo
Grial es la copa que contiene la Divina Sangre de Cristo.
El
símbolo de la Cruz representa la manera como se llega a la realización,
mediante el sufrimiento y el sacrificio, de lo que tanto huimos.
“EL ÁRBOL DEL BIEN Y DEL MAL
Se hace referencia en la biblia a estas palabras: “que no sea acaso que coman del árbol de la
vida y entonces sean uno como nosotros, o sea, que se transformen en dioses.”
¿qué se nos quiere decir con esta expresión? Que el hombre debe adquirir primero conocimiento del bien y del mal, así
llegar a la sabiduría que es vida, y en su momento llegar a ser plenamente
perfectos como Dios nuestro padre es perfecto.
La finalidad de todo hombre es convertirse en un Dios, y estas palabras
se encuentran en el Génesis.
Hay
infinidad de símbolos y el FUEGO es el
símbolo esotérico y místico por
excelencia, se nos dice que es el vehículo de la unión con la divinidad.
El fuego es la síntesis de las transformaciones de los otros tres elementos
–tierra, agua y aire-. El fuego se relaciona con el alma, con el corazón,
y con el sol, el vehículo de la luz. Cuando hablamos del Fuego estamos hablando
del Espíritu y cuando hablamos de Agni Yoga o Yoga del Fuego, estamos hablando
de la unión de la mente concreta con la Mente Abstracta o Superior, no es por
arte de magia, es porque a través de nuestro proceso evolutivo hemos
espiritualizado nuestros tres cuerpos y estamos en condiciones de unirnos con
la mente superior, ya hemos hecho el trabajo de desarrollo y explotación de la
mente concreta y tenemos que dar el siguiente paso. No podemos saltarnos
escalones, todos son necesarios y si nos saltamos alguno tendremos que repetir
la andadura.
Para llegar al
significado de los distintos símbolos tenemos que dejar de confundir cultura con
conocimiento espiritual, y conocimiento espiritual con Sabiduría.
Vamos a seguir con
frases o expresiones simbólicas de la Biblia:
“Jesús echa a los mercaderes del Templo”: No convirtamos la espiritualidad en un
mercadeo.
“Lo que hagáis a uno de éstos a mí me lo hacéis”: Se
nos habla de fraternidad.
“¿Quiénes son mi padre, mi madre y mis hermanos?: SOMOS
UNIDAD
“No se puede servir a dos señores”. No podemos servir a la Divinidad y a la
materia.
“No todo el que dice Señor, Señor, entrará en el
Reino de los Cielos”. No bastan las
palabras que deben corresponderse con las obras.
“Vende lo que tienes y repártelo a los
pobres”. Administra correctamente las
energías.
“Es más difícil que un rico entre en el Reino de los
Cielos que un camello por el ojo de una aguja”. DESAPEGO Y BUENA ADMINISTRACIÓN
DE ENERGÍAS. MUY DIFÍCIL
¿Cómo encontraremos los significados más ciertos?
BUSCANDO LA VERDAD que llegaremos a descubrirla en la medida que desarrollemos
nuestra conciencia, todo radica en nuestra conciencia.
La Intuición puede ser impulsada a su actividad de diversas maneras y una
de las más útiles y poderosas es mediante el estudio de los símbolos, que constituyen
la forma externa y visible de las realidades espirituales internas que la
sustentan.
Cuando el estudio de los símbolos se efectúa con fe y confianza conduce a
tres cosas:
1- Desarrolla el poder de penetrar detrás de la forma y llegar a la
realidad subjetiva.
2- Produce una estrecha integración
entre alma, mente y cerebro; una vez lograda, se obtiene rápidamente la
intuición y, por lo tanto, la iluminación y la verdad..
3- Ejerce presión sobre ciertas zonas aletargadas del cerebro, activando
las células cerebrales, despertando plenamente en el momento oportuno de cada
evolución.
Los símbolos deben ser estudiados de tres maneras:
-Exotéricamente: implica el estudio
de su forma externa, líneas, significado numérico, etc..por ej..cubo, cuadrado,
triángulos, y su mutua relación...
-Conceptualmente: hay que llegar a la idea subyacente en dicho símbolo, que
puede estar expresada en su nombre. Su significado surge en la conciencia por
medio de la meditación. Se debe recordar que la idea implica la intención
abstracta o superior; que el significado es ésa intención superior expresada en
términos de la mente concreta...
-Esotéricamente: Se percibe el efecto que produce la fuerza o energía del
símbolo y la calidad de vibración que podría despertar en alguno de los
centros, en el cuerpo astral o en la mente...
Si este estudio se desarrolla correctamente, indefectiblemente conduce al
desarrollo de la intuición y su consiguiente manifestación en el plano físico
como iluminación, comprensión y amor...
La lectura de símbolos o "lectura espiritual" como Patanjali la
llama, es un arte refinado..., tanto que exige el pleno desarrollo de la
conciencia.
Sobre todo y espiritualmente hablando, llegar al más profundo significado
de los
Símbolos representa un gran avance espiritual.
El estudio del
símbolo requiere, exotéricamente, el uso del cerebro y la memoria.
Esfuércense en estudiar línea y forma, número y aspectos generales externos,
sabiendo que toda línea tiene significado, todo número tiene su interpretación
y todas las formas son símbolos de una cualidad y vida internas.
El estudio conceptual del símbolo nos conduce,
internamente, del cerebro a la mente, en el reino de las ideas. Impele a la
actividad enfocada en el mecanismo mental. Así se darán cuenta del concepto o
la idea que el símbolo o signo
personifica. Captarán su significado y lo que representa. Comprenderán el
propósito para el cual la forma ha sido manifestada. El estudio de los números
y de las líneas les ha proporcionado una rica estructura de conocimientos en el
plano objetivo ‑riqueza que depende en este caso de la lectura individual,
equipo mental y conocimiento. La capacidad para leer el "significado"
que encierra un símbolo depende también de la riqueza del significado que
adjudican a los acontecimientos de la vida diaria y a la capacidad para
practicar la verdadera meditación.
Es vital para el crecimiento del
discípulo y de los aspirantes el equilibrio mental entre forma y concepto,
expresión y cualidad, y significado.
La gran necesidad que tienen la
mayoría de los estudiantes es trabajar con ideas y conceptos para llegar al significado, el cual necesitará el uso de la
mente para comprender, captar e
interpretar. Requiere el desarrollo de esa sensibilidad mental que permitirá,
a su poseedor, responder a las vibraciones provenientes de lo que llamamos
Mente Universal, la Mente de Dios, el Instigador del Plan. Presupone
determinada habilidad para interpretar y el poder de expresar la idea que
subyace en el símbolo, a fin de que otros puedan compartirla. Esta idea de
servicio y acrecentada utilidad debe mantenerse con firmeza en la mente.
Esta
capacidad de estudiar, interpretar y penetrar hasta el significado, acrecienta el progreso
espiritual.
Todo cuanto existe en este mundo
objetivo es un símbolo de una idea divina. ¿Qué somos nosotros sino la
expresión externa de una idea divina? Debemos aprender a ver los símbolos que hay
a nuestro alrededor y luego penetrar detrás de él y llegar a la idea que éste
debe expresar.
Profundizar
en el significado de los símbolos es importantísimo para la vida espiritual, y
el pan y el vino son símbolos solares que significan la luz del sol, es decir
la sabiduría y el amor y aquí también está el simbolismo de las palabras de
Jesús en la última cena "El que come mi carne y bebe mi sangre tendrá vida
eterna". El cuerpo de Cristo la Sabiduría y la sangre de Cristo, el Amor,
así tendremos vida eterna.
Y puesto que somos cada uno de los seres
humanos los responsables de desarrollar nuestra conciencia y así descubrir la Verdad,
sin copiar a nadie, sin crearnos dependencias, vamos a lanzar algunas preguntas
de interés para los aspirantes y discípulos, para que nos las contestemos
nosotros mismos, y a lo mejor tardamos en respondernos porque no es la
respuesta de la personalidad la que necesitamos, sino la del alma.
¿Qué objetivo tiene
el sexo en nuestra vida; es un divertimento que el creador nos ha regalado, o
tiene un fin más profundo; cual sería ese fin, lo sabemos, nos lo hemos
planteado?
Dijo Jesús que su
reino no era de este mundo ¿Para qué será este reino?
El testimonio de la
vida de Jesucristo, por supuesto que debe tener un alto significado
¿Respondemos nosotros a ese significado o no nos gusta y nos buscamos otro
significado más atractivo que nos alegre esta vida?
Terminamos
con esta reflexión en palabras de Annie Besant:
“Cada Filosofía que
se digne de tal debe tener influencia en la vida y en la conducta humana, y
cuanto más profunda sea la Filosofía, mayor será su influencia en ambas.”
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