EL AMOR
Cuando el amor a todos los seres, sin tener en cuenta quienes
son, comienza a ser una realidad en el corazón del discípulo, indica que se
está acercando al Portal de la Iniciación y puede prestar los juramentos
preliminares necesarios, antes de que su Maestro entregue su nombre como
solicitante de la iniciación. Si no le importa el sufrimiento y el dolor del yo
inferior, si le resulta indiferente ser feliz o no, si el único propósito de su
vida es servir y salvar al mundo y si las necesidades del prójimo son para él
de mayor importancia que las propias, recién entonces el fuego del amor irradia
de su ser y el mundo podrá sentirse confortado ante sus pies. Este amor debe
ser una manifestación probada y práctica y no sólo una teoría ni simplemente un
ideal impracticable y un sentimiento grato, sino algo surgido de las
experiencias y pruebas de la vida, de tal modo que el primer impulso de la vida
sea el autosacrificio y la inmolación de la naturaleza inferior.
Podría escribirse un tratado sobre el amor sin agotar el tema.
Mucha luz se obtendrá si podemos meditar profundamente sobre las tres
expresiones del Amor: el Amor expresado por la Personalidad, por el Ego y por
la Mónada. La Personalidad desarrolla el amor gradualmente por medio de las
etapas del amor al yo, pura, simple y totalmente egoísta, el amor a la familia
y a los amigos, a los hombres y mujeres, hasta llegar a la etapa del amor a la
humanidad o a la conciencia del amor grupal, característica predominante del
Ego. Un Maestro de Compasión ama, sufre y permanece con los de su clase y sus
allegados. El Ego desarrolla gradualmente el Amor a la humanidad hasta llegar al
amor universal, no expresa solamente amor a la humanidad sino también a todas
las envolturas de vidas y a todas las formas de manifestación divina. La
personalidad expresa el amor en los tres mundos, el Ego expresa el amor en el
sistema solar y todo su contenido; mientras que el amor expresado por la Mónada
demuestra en alguna medida el amor cósmico, abarcando mucho de lo que se halla
fuera de todo el sistema solar.
El amor fue el motivo impulsor para la manifestación, y mantiene
todo en secuencia ordenada; conduciéndolo hacia el sendero de retorno al seno
del Padre y, oportunamente, perfecciona todo lo que existe.
A medida que la evolución prosigue, se muestra como expansión
gradual de la facultad de amar, pasando por las etapas del amor al compañero,
amor familiar, a los allegados, hasta el amor por el propio medio ambiente; más
tarde el patriotismo es reemplazado por el amor a la humanidad, a menudo la
humanidad lo personifica en uno de los Grandes Seres.
El hombre por medio del servicio aprende el poder del amor en su significado oculto. Da, y por lo tanto recibe; vive la vida de renunciación, y las riquezas del cielo afluyen a él; da lo que posee, y a su vez es colmado hasta la saciedad; nada pide para sí y es el hombre más rico de la tierra.
El hombre por medio del servicio aprende el poder del amor en su significado oculto. Da, y por lo tanto recibe; vive la vida de renunciación, y las riquezas del cielo afluyen a él; da lo que posee, y a su vez es colmado hasta la saciedad; nada pide para sí y es el hombre más rico de la tierra.
Esta energía del amor está concentrada principalmente (para los
fines de la actividad jerárquica) en el Nuevo Grupo de Servidores del Mundo.
Este grupo ha sido elegido por la Jerarquía como Su principal canal de expresión;
está compuesto por todos los discípulos del mundo y los iniciados activos;
extrae sus representantes de cada grupo de idealistas y servidores y de todo
grupo de personas que expresan el pensamiento humano, especialmente en lo que
respecta al mejoramiento y elevación humanos. A través de ellos puede
expresarse la potencia de amor sabiduría. Con frecuencia dichas personas son
incomprendidas, porque el amor que expresan difiere ampliamente del interés
persona sentimental y afectivo, del trabajador común. Los miembros del Nuevo
Grupo de Servidores del Mundo se ocupan principalmente de los intereses y del
bien de todo el grupo al que están asociados, pero no de los mezquinos
intereses del individuo preocupado en
sus pequeños problemas y asuntos. Esto expone al servidor a ser criticado por
los individuos, y debe aprender a soportarlo y no prestarle atención. El amor
grupal verdadero es de mayor importancia que las relaciones personales, por más
que se satisfagan cuando surge la necesidad (obsérvese que digo necesidad). Los
discípulos aprenden a captar la necesidad del amor grupal y a corregir su
conducta de acuerdo al bien del grupo, pero no le es fácil al individuo
interesado en sí mismo captar esta diferencia. Por medio de los discípulos que
han aprendido a diferenciar entre los intereses mezquinos del individuo más su
propio interés y las necesidades y urgencias del trabajo y amor grupales, la
Jerarquía puede actuar y realizar los cambios mundiales necesarios, siendo
principalmente cambios de conciencia.
El amor, para mucha gente, en realidad para la mayoría, no es
realmente amor sino una mezcla de deseo de amar y deseo de ser amado, más un
deseo de realizar cualquier cosa para demostrar y evocar este sentimiento y, en
consecuencia, sentirse más cómodo en su propia vida interna.
Este seudo amor, basado principalmente en la teoría del amor y
el servicio, caracteriza a innumerables relaciones humanas, tales como las
existentes entre marido y mujer o padres e hijos. Ilusionados por un
sentimiento hacia ellos y conociendo muy poco el amor del alma, que es libre en
sí mismo y deja libres también a otros, deambulan en una densa bruma, hundiendo
a menudo con ellos a quienes desean servir, esperando recibir afecto recíproco.
Reflexionan sobre la palabra "afecto" y obtendrán su verdadero
significado. Afecto no es amor, sino ese deseo que expresamos mediante un
esfuerzo del cuerpo astral, afectando esa actividad nuestros contactos; tampoco
es el espontáneo altruismo del alma que no pide nada para el yo separado. Este
espejismo del sentimiento aprisiona y confunde a toda la gente buena del mundo,
imponiéndole obligaciones que no existen y produciendo un espejismo que debe
ser disipado oportunamente mediante la difusión del amor verdadero y desinteresado.
Sólo un pensamiento le
daré para que lo repita, siempre que se sienta desalentado, cansado o débil:
"En el centro de todo amor yo permanezco y nada puede
llegarme aquí y desde ese centro me exteriorizaré para amar y servir".
Que el amor sea la nota clave en todas las relaciones, porque el
poder que salvará al mundo es la precipitación del amor.
El amor no es un sentimiento ni una emoción, tampoco un deseo o
móvil egoísta para actuar correctamente en la vida diaria. Amar es esgrimir la
fuerza que guía los mundos y conduce a la integración, unidad e inclusividad,
que impele a actuar a la Deidad misma. El amor es algo muy difícil de cultivar,
debido al egoísmo inherente de la naturaleza humana, y difícil de aplicar en
todas las condiciones de la vida, y su expresión exigirá al máximo lo que
puedan dar y el abandono de toda actividad personal egoísta.
Elimine cualquier pensamiento que no sea amoroso, deseche toda
crítica y aprenda a amar a todos los seres, no teóricamente sino de hecho y en
verdad.
Les recordaré que en estos momentos de prueba yo, su Maestro,
los amo y protejo, pues sus almas y la mía son una sola. No se preocupen
indebidamente. Para el alma no hay luz ni oscuridad, sino sólo existencia y
amor. Dependan de esto. No hay separación, sino únicamente identificación del
corazón con total amor; cuanto más amor demuestren, más amor puede llegar a
otros a través de ustedes. Las cadenas del amor unen el mundo de los hombres y
el mundo de las formas, constituyendo la gran cadena de la Jerarquía. El
esfuerzo espiritual que se les pide realizar es desarrollarse y llegar a ser un
centro vibrante y poderoso de ese fundamental Amor universal.
Al AMOR, el origen y el fin de toda la creación, llegaremos y lo manifestaremos cuando alcancemos la perfección porque es un resultado de haber purificado y espiritualizado la materia de nuestra personalidad. El proceso es largo.y al mismo tiempo gratificante: despertar de la conciencia y desarrollarla a través de las distintas Iniciaciones, hasta llegar a la cuarta, en que habiendo pasado por todas las cualidades de los siete Rayos y habiéndolos situado en el centro, en el punto de equilibrio, en la perfección, los Siete Rayos, se sintetizan en el 2º de Amor/Sabiduría que contiene todos los Rayos. Es decir el 2º Rayo de Amor / Sabidurías se manifiesta cuando hemos adquirido la perfección. AMOR ES PERFECCIÓN.
Al AMOR, el origen y el fin de toda la creación, llegaremos y lo manifestaremos cuando alcancemos la perfección porque es un resultado de haber purificado y espiritualizado la materia de nuestra personalidad. El proceso es largo.y al mismo tiempo gratificante: despertar de la conciencia y desarrollarla a través de las distintas Iniciaciones, hasta llegar a la cuarta, en que habiendo pasado por todas las cualidades de los siete Rayos y habiéndolos situado en el centro, en el punto de equilibrio, en la perfección, los Siete Rayos, se sintetizan en el 2º de Amor/Sabiduría que contiene todos los Rayos. Es decir el 2º Rayo de Amor / Sabidurías se manifiesta cuando hemos adquirido la perfección. AMOR ES PERFECCIÓN.